Alternativas en el Foro Social de Porto Alegre

El modelo de desarrollo imperante muestra su incapacidad para ofrecer una alternativa de vida digna para el conjunto de la humanidad. Señala Sergio Ferrari que el Foro Social Mundial significa alimentar, imaginar y diseñar un concepto tan simple como profundo: Alternativas.

La economía mundial está en desaceleración. El Fondo Monetario Internacional (FMI) afirma que no va a crecer más del 2.4% este año. "En ese mar de pobreza, escribe Frei Beto, es de ilusos esperar una tabla de salvación neoliberal que venga de las islas de opulencia. Hay que buscar una alternativa al actual modelo económico, antes de que la desesperación fomente todavía más el terrorismo. Y esa alternativa pasa, necesariamente, por el cambio de valores, y no sólo de mecanismos económicos".

La lógica de este sistema promueve una polarización social profunda e irreversible que, para mantenerse, debe arrojar cada día a más seres humanos al abismo de la marginación.

La actual crisis de Argentina, alumna aventajada del FMI y del Banco Mundial en la ejecución de los programas de ajuste estructural, no es más que un ejemplo dramático de este proceso de exclusión creciente para los pueblos empobrecidos del Sur. Con la receta de ajuste, deuda externa, desmantelamiento del Estado social y corrupción local se consigue oprimir y amordazar a una creciente mayoría. ¿Adónde pretenden llegar los cómitres cuando ya no queden esclavos para remar en su galera? Se harán un lazo con los rebenques para colgarse. Pero eso ni nos satisface ni vamos a permitirlo. Tienen que reparar el daño causado. De ahí que busquemos propuestas alternativas coherentes, eficaces e ilusionantes.

La propaganda invade los medios de comunicación. A veces, manipulada desde centros académicos que actúan como mamporreros de un sistema en el que deberían participar con una reflexión serena y objetiva, coherente con la noble tarea de investigar y de enseñar, propia de la responsabilidad que la sociedad ha confiado a sus universidades. Es alarmante el número de artículos firmados por profesores, becados por transnacionales, y que eficaces agencias de distribución colocan en multitud de medios, ayudados por una generosa cartera de publicidad.

El discurso oficialista pregona machaconamente que no existe ninguna alternativa viable a la actual globalización de capitales y mercados, ni existe la posibilidad de buscarla. Que es preciso aceptar la lógica del mercado como se acepta la ley de la gravedad.

En Porto Alegre se defiende Otro Mundo Posible que se ha hecho imprescindible para la supervivencia de la especie humana. Sostiene Ferrari que la búsqueda de alternativas como visión estratégica, global y duradera se ha convertido en un inalienable derecho de la humanidad ante el que ceden todos los demás derechos, pues la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad son derechos fundamentales. Estos derechos de la persona han sido sancionados por las Cartas Magnas de la Humanidad, que no creados por ellas. Sólo los han reconocido y se han comprometido a defenderlos -con riesgo de la vida si es preciso- utilizando todos los medios legítimos. Entre ellos destaca el derecho de resistencia que se convierte en deber de rebelión cuando se trata de una agresión organizada contra los débiles por parte de los poderes tiránicos en nombre del mercado, de los beneficios económicos o de un modelo de desarrollo excluyente y prepotente que ha mostrado su injusticia al producir tantas víctimas inocentes.

Con Frei Beto es preciso afirmar que si el mundo gira en torno a la economía y la economía en torno al mercado, eso significa que éste, idolatrado por sus secuaces, se preconiza por encima de los derechos de las personas y explota las riquezas de la Tierra, como si fueran meros recursos. Se presenta como un bien absoluto con lo que se produce una flagrante inversión de valores. "Los productos pasan a ser sujetos y las personas objetos. Es el producto que imprime valor a quien lo posee. Por tanto, los desposeídos carecen de valor y, descartados del juego económico, son atraídos a reverenciar la abundancia de los privilegiados". Se puede denunciar más alto, pero no más claro.

Las alternativas se han hecho imprescindibles, por eso tenemos que convertirlas en realidades concretas. Lo absolutamente necesario siempre es posible, si no se trataría de quimeras. La extensión de las protestas y de los desafíos sostenidos por un amplio sector contra la actual gestión de la globalización, que no contra la evidencia de la globalidad como conquista de las técnicas, se funda en la convicción necesaria de incrementar la presión social contra el modelo imperante.

En esta segunda edición del Foro Social de Porto Alegre destacan una serie de iniciativas sostenibles y equilibradas que requieren explicitarse como posibles porque son necesarias. Entre ellas destacan el reconocimiento de que la deuda de los países del Sur ya está pagada con creces: no hay nada que condonar. Asimismo, lo que durante años fue considerado como utopía irrealizable, la imposición fiscal a las transacciones financieras internacionales ya es objeto de discusión en parlamentos y universidades. El movimiento ATTAC no ha trabajado en vano. Ferrari añade la propuesta de crear fondos de desarrollo alternativo alimentados por la reducción de gastos militares, la recuperación de bienes acumulados en el norte e ilícitamente desviados desde el sur y la reparación debida por quienes esquilmaron durante siglos a pueblos y tierras. Fortalecer los acuerdos regionales Sur-Sur, redefinir las políticas proteccionistas de los productos del norte y las condiciones que ahogan los mercados del sur ayudará a promover la producción nacional y a avanzar en la defensa de la autonomía alimentaria dentro de un marco de relaciones justo y solidario.

Comoquiera que la rapiña y corrupción de muchos dirigentes políticos del sur no pueden evadir el juicio de la historia, pues sus crímenes no prescriben ya que las víctimas fueron personas inocentes masacradas por el delito de no pertenecer a las minorías conquistadoras, es verosímil y exigible un "impuesto excepcional sobre la fortuna de los más ricos de cada país del sur para proyectos sociales, para implementar la reforma agraria y urbana o, simplemente, para el relanzamiento productivo interno". Los argumentos que sirvieron para justificar las reparaciones a los descendientes de los judíos masacrados en el Holocausto nazi son totalmente aplicables: millones de seres han sido esclavizados, explotados y desarraigados durante siglos por las potencias arias, europeas, cristianas y musulmanas. Ahí está la historia de la masacre de negros africanos, de indígenas americanos y de enteras poblaciones asiáticas. ¿No dicen que impera la globalización? Pues seamos consecuentes.

Puesto que las alternativas existen, se trata de formularlas y presionar por todos los medios para aplicarlas. Hasta el astuto Aquiles, el de los pies ligeros, tenía un talón vulnerable. No hay gigante sin los pies de barro.

Con Frei Beto aportaremos fuerzas para que el Foro Social Mundial sea una luz que se encienda al final del túnel, rescatando la esperanza de tantos militantes de la utopía que se avergüenzan de convivir con 4 mil millones de seres humanos, víctimas de un sistema que imprime al pan valor de cambio, como mercadería, y no-valor de uso, como bien indispensable para nuestra sobrevivencia biológica.

José Carlos Gª Fajardo

Este artículo fue publicado en el Centro de Colaboraciones Solidarias (CCS) el 01/02/2002